Este
rito milenario consiste en realizar 5 ejercicios cada día, desde 1 a
21 repeticiones de cada ejercicio. Son ejercicios de flexión
corporal a excepción del primero. Si al principio no tienes
suficiente fuerza o por algún motivo no puedes realizar los 5
ejercicios, con hacer el primero ya verás y sentirás una mejoría.
La
práctica regular de estos ejercicios alivia la tensión muscular y
el estrés nervioso, mejora la respiración y la digestión,
beneficia el sistema cardiovascular y conduce hacia la relajación
profunda y el bienestar.
Yo
los conozco desde hace algunos años, y como con todo, he tenido mis
más y mis menos, pero aún así he notado mejoría. Por ejemplo,
desde un mayor nivel de energía y fuerza, hasta el ya no necesitar
las gafas para leer (pasé de necesitar las gafas porque las letras
se ponian a bailar mientras leia, a no saber donde están las gafas,
porque simplemente ya no las necesito).
Yo
os dejaré los 5 ejercicios con una breve explicación, pero como
todo, si queréis más información y una explicación más extensa,
os recomiendo que os hagáis con el libro, porque sin duda será una
de vuestras mejores inversiones para vuestra salud.
Colócate
de pie con las brazos extendidos haciendo una “T” con el torso y
gira hacia la derecha haciendo entre una y 21 vueltas, según lo que
vayas pudiendo. Así cada día.
Este
ejecicio es la clave, ya que nos ayuda a energetizar los vórtices de
nuestro cuerpo dándonos mayor vitalidad.
Túmbate
sobre una esterilla o alfombra con las piernas estiradas y los brazos
al lado del cuerpo.
Exhala
y eleva simultaneamente la cabeza y las piernas totalmente estiradas.
Inhala y baja la cabeza y las piernas. Puedes colocar las manos un
poco por debajo de los glúteos para ayudarte con la elevación.
Nos
ponemos de rodillas y bajamos ligeramente la cabeza.
Colocamos
las manos en la zona lumbar y al inhalar abrimos el pecho, arqueando
la espalda y llevando la cabeza hacia atrás, exhalamos volviendo a
la posición inicial.
Siempre
movimientos suaves. Sin forzar la espalda y/o el cuello.
Nos
sentamos sobre la esterilla con las piernas totalmente estiradas,
espalda recta, brazos al lado del cuerpo y las manos sobre el suelo.
Inhalamos
y subimos doblando las rodillas, elevando las caderas y llevando
ligeramente la cabeza hacia atrás.
Exhalamos,
bajando y regresando a la posición inicial.
Nos
colocamos boca abajo en posición de flexiones.
Elevamos
en torso empujando con las manos estirando los brazos, las piernas
siguen en el suelo. (Posición inicial)
Exhalamos
y elevamos las caderas, hasta formar una V invertida, acercando
ligeramente el mentón al pecho y hacemos presión con las manos
sobre el suelo.
Inhalamos
y bajamos volviendo a la posición inicial.
Os
recomiendo hacer los cinco ritos por la mañana, no te llavará mucho
tiempo y empezarás el día lleno de energía. Pero por si cualquier
cosa no puedes, puedes hacerlo durante el día. Recuerda hacer de 1
hasta 21 repeticiones de cada ejercicio. Ve poco a poco y sobretodo
sé constante, verás como dentro de poco te iras sintiendo cada día
mejor.
Beneficios:
- Incremento notable de agilidad y flexibilidad
- Mayor agudeza mental
- Mejora en la fuerza, resistencia y elasticidad corporal
- Enorme sensación de relajación tras realizarlos, por lo que mejora el descanso
- Se regula la función intestinal
- Cuerpo más firme, piel más tersa
- Fortalecen el abdomen
- Mayor flexibilidad en columna y articulaciones.
- Mejor ánimo y estabilidad emocional
- Aumento de la capacidad creativa
- Desintoxicación general
- Aumento de la energía
- Se reducen las horas necesarias de sueño
- Eliminan la papada
Si
ya conocías estos ritos no dudes en dejar tus comentarios y si lo
vas a probar, dinos qué tal te va.
No hay comentarios:
Publicar un comentario